viernes, 25 de septiembre de 2015

INCLUSIÓN EN NUESTRA SOCIEDAD (Texto de Estudiante D.P)

Por: SANDRA PATRICIA RESTREPO G. - Desarrollo del Pensamiento II

En el pasado las personas en condición de discapacidad eran tratadas como sujetos minusválidos, su aporte en la sociedad era menospreciado y no se tenían en cuenta, sus necesidades solo representaban una carga y su círculo de convivencia se limitaba a sus cuidadores; cuando miramos el trato que damos en la actualidad podemos percibir un cambio, que si bien no llega a su mayor alcance, si está en un proceso de adaptación que permite incluirlos en la sociedad como individuos pensantes y útiles, con necesidades físicas y pedagógicas especiales.

Aunque muchos no entendemos de condiciones médicas y no conocemos los miles de síndromes que existen, a nuestra generación la formaron con una mayor tolerancia a la diferencia, nuestro entorno ya se está adaptando a las necesidades especiales que tenemos como individuos y comprendimos que no solo es diferente aquel que está en condiciones de discapacidad, si no que nuestro mundo, que hasta  el momento era rígido al concepto de lo normal, acoge la idea de que los pensamientos y las acciones diferentes es lo que enriquece nuestra cultura.
Cada vez es más normal ver adaptaciones en edificaciones para una mejor movilidad, escuchar noticias sobre cine para personas con deficiencia visual, encontrarnos con personas comunicándose a través del lenguaje de señas, adaptaciones curriculares para personas con necesidades pedagógicas especiales, nuestra sociedad está cambiando, y comienza a aceptar que ya no nos podemos comportar como un colectivo, sino que debemos de actuar como individuos y que nuestro entorno debe de adaptarse a nosotros y no viceversa. La discapacidad no solo es representada por una enfermedad, es una condición menos favorable para el desarrollo de actividades cotidianas, desde este punto de vista  todos tenemos cierto nivel de discapacidad, y es allí donde el medio nos debe de proporcionar las condiciones adecuadas para desarrollarnos sin límites.

Comprendamos entonces que las condiciones no deben de limitar nuestro desarrollo, las personas en condición de discapacidad no solo merecen igualdad sino también equidad, y es responsabilidad de nuestra sociedad velar por su bienestar y respeto a sus derechos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario